- Iniciativa permite reforzar atención en salud con pertinencia cultural en Chirripó y busca consolidar alianzas que faciliten el acceso a la atención en zonas de difícil acceso.

Con el objetivo de garantizar el acceso a servicios de salud especializados, con pertinencia cultural, en territorios caracterizados por su alta vulnerabilidad y difícil acceso, funcionarios del hospital William Allen Taylor visitaron el territorio indígena de Alto Pacuare, en el distrito de Chirripó.
Según explicó la licenciada Laura Fonseca Cordero, coordinadora del Programa Local de Pertinencia Cultural del hospital, el equipo estuvo conformado por profesionales en ginecología, trabajo social, farmacia y enfermería, quienes contaron con el acompañamiento de representantes de las direcciones general y administrativa.

Durante la gira se reunieron con cerca de 25 mujeres cabécares, acompañadas de sus hijos, en un ambiente de respeto y valoración de los saberes ancestrales.
El espacio permitió compartir educación, vivencias y reflexiones en torno a la salud de la mujer indígena, reconociendo su rol fundamental como cuidadoras de la salud familiar y comunitaria.
Además, se promovió la generación de espacios de diálogo, escucha activa y aprendizaje compartido, para fortalecer la confianza y el respeto intercultural.
“Brindar charlas educativas y atenciones especializadas en salud a las comunidades indígenas es un acto de compromiso y respeto. Sabemos que muchas de estas comunidades enfrentan barreras para acceder a servicios e información especializada, por eso estos acercamientos son fundamentales para construir puentes reales y efectivos”, señaló la licenciada Fonseca.

El hospital agradeció de manera especial al grupo de mujeres cabécares Kjalá Bata, quienes hicieron posible el encuentro. “Nos sentimos profundamente honrados por su apertura y disposición para compartir su sabiduría con nosotros”, manifestó.
La funcionaria aseguró que esta estrategia busca acercar los servicios de salud que brinda el hospital a las comunidades indígenas con pertinencia cultural, asegurando un proceso de comunicación respetuoso y efectivo que fortalezca la confianza y la participación comunitaria en el cuidado de la salud.
“Este esfuerzo, además, representa una herramienta de inclusión, que no solo acerca los servicios de salud, sino que también fomenta el respeto mutuo y la esperanza de construir juntos un sistema de salud más accesible, humano y justo para todas las poblaciones”, finalizó.