Los asegurados que reciben atención en la unidad de cuidados intensivos del hospital San Vicente de Paúl, en Heredia, se beneficiarán con nuevos monitores de signos vitales y camas especializadas, valorados en $356 786. Estos equipos permitirán mejorar la atención de pacientes en condición crítica.
Según el doctor Rodrigo Brenes Calderón, jefe de la unidad de cuidados intensivos del hospital, la utilización de monitores de signos vitales y otros parámetros en estas unidades es sumamente importante, ya que permite valorar y vigilar la evolución de los pacientes graves, además de monitorizar su progreso. Estos pacientes se encuentran en el nivel más elevado de complejidad de su enfermedad, por lo que son vulnerables a eventos clínicos o complicaciones potencialmente mortales durante el curso de su estancia.
Asimismo, los sistemas de monitorización y la integración de tecnología de información en salud se han convertido en herramientas fundamentales para vigilar los signos vitales de los pacientes. Por su parte, el personal asistencial tiene la oportunidad de mejorar su desempeño y tomar acciones en tiempo real, puesto que ya es posible disponer de toda la información del paciente en un mismo sistema.
La integración de datos, la posibilidad de analizar tendencias, la flexibilidad y la capacidad de disponer de nuevas variables de monitorización no invasiva y mínimamente invasiva marcan el camino de los monitores de signos vitales para los servicios de cuidados intensivos.
El doctor Brenes indicó que, pensando en el bienestar del paciente, también se adquirieron cuatro camas de cuidados intensivos para un manejo apropiado. Estas camas permiten evitar complicaciones propias del encamamiento y brindar comodidad, debido a que, en ocasiones, los pacientes permanecen muchos días encamados. En ellas se les debe realizar el baño, atender sus necesidades fisiológicas y aplicar la mayoría de los tratamientos. Con estas camas se disminuye la morbilidad de los pacientes en estado crítico.
ATENCIÓN A PACIENTES CON OBESIDAD CON EQUIPAMIENTO ESPECIALIZADO
La obesidad es una patología de la era actual, producto de hábitos de vida poco saludables. Esta condición se presenta con mayor frecuencia en pacientes que ingresan a la unidad de cuidados intensivos, ya sea por accidentes o por patologías secundarias. Debido a su constitución, son de manejo más complejo y requieren del equipo adecuado para facilitar terapias que disminuyan su morbilidad.
Ante esto, la incorporación de una nueva cama bariátrica como parte de los nuevos equipos permitirá marcar la diferencia en el tratamiento de estos pacientes.
Los nuevos equipos fueron financiados por la Junta de Protección Social. Precisamente, Esmeralda Britton González, presidenta de esa institución, agregó que “La Junta de Protección Social no solo administra juegos de azar: administra solidaridad. Y lo hace con la transparencia y la convicción de que los recursos deben llegar a donde más se necesitan. Quiero aprovechar esta ocasión para recordar que cada uno de estos proyectos de impacto social es posible gracias a la venta de lotería estatal. Cada billete, cada fracción que se adquiere, representa una inversión solidaria en salud, bienestar y esperanza.”
“Este proyecto no solo es una entrega de equipos. Es la confirmación de que, cuando el país confía, participa y colabora, podemos fortalecer nuestras instituciones, proteger la vida y asegurar que ninguna persona se quede atrás”, añadió.
Por su parte, la doctora Priscila Balmaceda Chaves, directora general del hospital San Vicente de Paúl, agradeció a la Junta de Protección Social por la donación, así como a la Asociación Pro Hospital, y recalcó que la adquisición de estos equipos será de gran utilidad para los pacientes de la provincia de Heredia.